Page 204 - Sin Noticias De Gurb - Eduardo Mendoza
P. 204
un tipo, dice, como José Luis Doreste, pero, sin saber cómo
ni por qué, siempre acaba enamorándose de los más
mandantes. Le digo que esto le ha sucedido porque se ha
vuelto una golfa. Gurb replica que eso no es cierto. Lo que
ocurre, dice, es que yo siempre he ido de plasta por la vida.
Discutimos un rato acaloradamente hasta que interviene el
mayordomo para recordarnos (con la máxima discreción)
que dos extraterrestres en misión espacial no deberían
perder el tiempo peleando como verduleras. Y menos,
añade, por semejantes tonterías. Él, si quisiera, podría
contarnos casos realmente conmovedores. Casos, dice, que
nos moverían al llanto. Porque él, dice, es un hombre que
ha vivido mucho. En su casa eran quince de familia. En
realidad, él era hijo único, pero tenía dos padres, cuatro
abuelos y ocho bisabuelos que no cascaban ni a tiros. En su
infancia pasaron tanta hambre, que se comían los cupones
de racionamiento antes de que llegara el día de canjearlos
203

