Page 792 - La Herejia De Horus 01 - Horus El Señor De La Guerra - Abnett Dan
P. 792
del comandante general sobre el tema en una
atmósfera en la que cualquier ofensa podía dejarse de
lado como simple conjetura. A Loken no le gustó
demasiado la idea, pero confió en que su comandante
la formularía con delicadeza. Era un momento
incómodo, bien entrada la tercera semana de su visita
cada vez más infructuosa. Dos días antes, el primarca
Sanguinius se había despedido y regresado a
territorio imperial con sus ángeles sangrientos.
Estaba muy claro que a Horus no le gustó nada verlo
marchar, pero era una medida prudente, y Sanguinius
había elegido llevarla a cabo simplemente para
conceder más tiempo a su hermano con los
interexianos. Sanguinius regresaba para ocuparse
directamente de algunas de las cuestiones que
requerían con mayor urgencia la atención del señor de
la guerra, y calmar así las muchas voces que
suplicaban su inmediato regreso.
La casa de Naud era una construcción notoriamente
enorme situada cerca del centro de la ciudad. Con seis
pisos de altura, sobresalía de una de las gradas cívicas
más espléndidas y estaba construida a partir de un
791

