Page 162 - Historia Dominicana desde los aborigenes
P. 162
Cabral, que antes de 1861 había sido uno de los jefes del movimento
de Báez, se unió a seguidores de este, quienes coparon el gobierno.
A los pocos meses se levantó en armas Pedro Guillermo, quien se
colocó con tropas en la parte oriental de la ciudad de Santo Domingo
y exigió el retorno de Báez a la presidencia. Cabral no se opuso al
levantamiento de Guillermo y viajó a la isla de Curazao para buscar a
Báez y entregarle la presidencia.
En el ascenso de Báez influyó la división en el seno de los azules, que era un grupo
poco coherente y liderado por varios militares, como Luperón, Pimentel y el mismo
Cabral.
Ya en el poder, Báez atrajo a restauradores, apartó a sus rivales y les dio cargos
a sus incondicionales. Con Báez brotaron de nuevo las tendencias anexionistas y
el caudillismo represivo. Sin embargo, al querer asumir poderes dictatoriales, fue
enfrentado por generales que estaban bajo la influencia de Pimentel, Luperón y
otros líderes de la Restauración.
Báez fue derrocado y Cabral pasó a controlar otra vez el Gobierno. El segundo
gobierno de Cabral fue débil e incoherente, sobre todo por la oposición de
Pimentel, quien representaba los intereses del grupo del Cibao. Además, Luperón
se opuso a la política conservadora de Cabral, quien intentó arrendarle la península
y la bahía de Samaná a Estados Unidos.
El gobierno de Cabral también se debilitó porque muchos militares se pasaron al
bando de Báez y porque fue rechazado por el campesinado, que se veía afectado
por una política que favorecía exclusivamente a los grupos poderosos. A principios
de 1868, el gobierno de Cabral fue derrocado y Báez tomó el poder por cuarta vez.
Historia dominicana: desde los aborígenes... 162 Nacionalismo, anexionismo y caudillismo

