Page 106 - Arcana Mundi - Elizabeth Bear
P. 106
106
Ferron avanzó con cuidado por una exuberante
bioalfombra salpicada de flores violetas y amarillas y llamó
a la puerta con suavidad. Una voz se alzó por encima del
zumbido:
—¡Namaskar!
El doctor Rao era un hombre delgado y alto con ojos
rodeados de profundas arrugas. Caminaba despacio sobre
una cinta andadora, con un teclado y un monitor viejos
montados en un brazo giratorio delante de él. Cuando
Ferron entró, apartó el brazo pero siguió caminando. Del
monitor se desprendió una luz ambarina justo antes de
apagarse: ahora estaba cargando la batería.
—Namaskar —contestó Ferron. Trató de que no se le
notara demasiado que estaba mirando el escritorio
ambulante.
No debió de conseguirlo.
—Parte de mi normalización mental, señora —dijo Rao,
encogiendo los hombros como a modo de disculpa—. Tengo
fibromialgia y el ejercicio suave ayuda. Usted tiene que ser
la subinspectora. ¿Cómo practica el ejercicio prescrito? Se
mueve con enorme confianza.
—Practico kalari payat —respondió Ferron, nombrando

