Page 609 - Anatema - Neal Stephenson
P. 609
—Bien, a Lio le confiaría mi vida —le dije—. Delante de
él puedes decir todo lo que le dirías a otro edhariano.
—Vale —dijo Criscan—. No me sorprende que nunca lo
hayas oído mencionar, ya que sólo llevas unos meses en la
Orden de Sante Edhar, y no eres más que un… eh…
—¿Sólo un Diece? —dije—. Adelante, no me ofendes. —
Pero sí que me ofendía un poco. A espaldas de Criscan,
Lio puso una cara graciosa que le quitó hierro a la
situación.
—En caso contrario habrías oído rumores. Comentarios.
—¿Como cuáles?
—Primero, que los edharianos en general están un poco
locos. Que son un poco místicos.
—Por supuesto, conozco a gente así —dije.
—Vale —dijo Criscan—. Bien, entonces sabrás que una
de las razones para que la gente mire con recelo a los
edharianos es que da la impresión de que nuestra
devoción por el Mundo Teorético de Hylaea podría ser
más importante que nuestra lealtad a la Disciplina y a los
principios de la Reconstitución.
—Bien —dije—. Pienso que es injusto, pero comprendo
por qué alguien podría pensarlo.
Lio añadió:
—O fingir pensarlo, para tener un arma que esgrimir
frente a los edharianos.
—Bien —dijo Criscan—, imagina que hubiese, o se
creyese que hay, un linaje de ultraedharianos.
609

