Page 235 - Enciclopedia De Los Mitos De Cthulhu - Daniel Harms
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Eihort lo aplasta. Si dice que sí, lo paraliza e inyecta en
su cuerpo miembros inmaduros de su progenie. Como
este proceso también incluye una especie de hipnosis, es
posible que, al despertar, la persona no recuerde lo
ocurrido. Al principio, la víctima infestada parece
normal, pero pronto empieza a sufrir visiones de
terribles sucesos sobrenaturales. Tras un tiempo, estas
visiones crecen en intensidad y duración, hasta que al
final el Pactante se abre en canal y de él brotan cientos de
pequeñas crías de Eihort que se alejan a toda velocidad.
Pocos osan hacer el Acuerdo con Eihort.
En Abandonar este mundo, de Roland Franklyn, se
puede encontrar una curiosa referencia a Eihort. Según
este supuesto profeta, un iniciado de la secta de Eihort
debe ser incinerado para que su alma pueda escapar. De
lo contrario, al enterrarlo el alma permanecerá en el
cuerpo y los monstruos que cavan túneles arrastrarán su
cadáver hacia el interior de la tierra, para que Eihort lo
devore (es triste tener que decir que el propio Franklyn
no fue incinerado).
Consulta Abandonar este mundo; Brichester;
Camside; Franklyn, Roland; Primigenios; Revelaciones
de Glaaki; Severn, Valle del. («Before the Storm»,
Campbell [O]; «Los párrafos de Franklyn», Campbell;
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