Page 916 - La Estacion De La Calle Perdido - China Mieville
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Isaac se diera cuenta de nada, lo atacó con dos de las
alargadas y dentadas garras, atravesó con ellas las
muñecas de Shadrach y lo apresó físicamente contra el
muro.
Shadrach e Isaac gritaron a un tiempo.
Mientras mantenía las dos lanzas óseas en el lugar,
la polilla extendió sus dos manos cuasihumanas y
palpó los ojos de Shadrach. Isaac lanzó un gemido,
tratando de advertirlo, pero el gran guerrero estaba
confuso, presa de la agonía, y miraba
desesperadamente a su alrededor para ver qué era lo
que le causaba tanto dolor.
En vez de eso, vio las alas de la polilla.
Se calmó al instante y la criatura, la cabeza todavía
humeando y crepitando a causa del calor del ataque del
constructo, se inclinó hacia delante para alimentarse.
Isaac apartó la mirada. Volvió la cabeza
cuidadosamente para no ver cómo aquella probóscide
sorbía la consciencia del cerebro de Shadrach. Isaac
tragó saliva y comenzó a cruzar lentamente la
habitación en dirección al agujero y al túnel. Las
piernas le temblaban y apretó la mandíbula. Su única
esperanza era marcharse. De ese modo podría
sobrevivir.
Puso mucho cuidado en ignorar los babeantes
sonidos de succión, los líquidos gemidos de placer y el
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