Page 329 - Un Mundo Fuera Del Tiempo - Larry Niven
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Larry Niven Un mundo fuera del tiempo
—Me alegra que me aceptéis para ese
importante propósito.
En realidad, Corbell estaba nervioso. De
pronto tomó conciencia de su semidesnudez.
Los dikta iban totalmente desnudos.
Una de las mujeres, cuya larga cabellera negra
empezaba a tornarse gris, dijo:
—Debe de hacer mucho tiempo que no haces
hijos con una mujer.
Corbell se echó a reír e hizo la división por
doce:
—Doscientos cincuenta mil años —dijo.
La siguiente pregunta de la mujer despertó las
risas de todos. Corbell movió la cabeza y
respondió:
—Tal vez haya olvidado cómo. Sólo hay un
medio de averiguarlo.
Ayudó a los Varones a instalar el
campamento. Un bosquecillo se alzaba en el
centro del jardín semicircular amurallado,
mucho más pulcro que la selva de Sarash‐
Zillish. Los Varones acamparon bajo los árboles
y encendieron fuego con leña que trajeron las
mujeres dikta.
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