Page 84 - Dimension De Milagros - Robert Sheckley
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—Yo me ocuparé de tus necesidades —dijo Carmody,
sintiendo un súbito afecto por su Premio—. Pero será
después que termine esta maldita emergencia.
—Por supuesto, viejo. Olvídate de mi mal humor.
¿No te molesta que termine de almorzar?
—No, termina tranquilo —contestó Carmody.
Tuvo la curiosidad de ver cómo un caldero metálico
podía devorar un animal desollado, pero llegado el
momento tuvo demasiado asco para mirar.
—¡Ah, qué bueno estaba! —dijo el Premio—. Te he
dejado un poco, si es que quieres probar...
—En este momento no tengo demasiado apetito —
dijo Carmody—. ¿Qué era lo que comías?
—Se llama ʹorithiʹ —contestó el Premio—. Vosotros
lo consideráis una especie de hongo gigante; es delicioso
crudo o ligeramente hervido en su propio zumo. La clase
blanca con manchas es mejor que la verde.
—Trataré de recordarlo —dijo Carmody—, en caso
de que alguna vez los encuentre. ¿Crees que un terráqueo
puede comerlos? —Creo que sí —dijo el Premio—. Ah, de
paso; si alguna vez tienes la oportunidad, antes de
comértelo, pídele que te recite un poema.
—¿Por qué?
—Los orithi son buenos poetas.
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