Page 102 - El Horror De Dunwich - H P Lovecraft
P. 102

Un escalofrío sacudió tanto a la gente del lugar


              como a los visitantes y cada oído pareció aguzarse


              en una especie de atención inconsciente, instintiva.


              Armitage, ahora que había dado con el horror y su



              obra monstruosa, temblaba con la responsabilidad


              que  recaía  sobre  sus  hombros.  Pronto  caería  la


              noche  y  era  entonces  cuando  la  montañosa


              blasfemia  emprendía  su  temible  curso.  Negotium


              perambulans  in  tenebris…  El  viejo  bibliotecario


              ensayó la fórmula que había memorizado mientras


              estrujaba  el  papel  que  contenía  la  fórmula



              alternativa que no había memorizado. Comprobó


              que  su  linterna  funcionara.  Rice,  justo  a  su  lado,


              tomó de una valija un pulverizador metálico de los


              que  se  usan  para  fumigar  insectos,  mientras  que


              Morgan desembalaba el rifle de caza mayor en el


              que  confiaba  pese  a  que  sus  colegas  le  habían


              advertido de que nada material podría ayudarles.




                     Habiendo  leído  el  odioso  diario  de  Wilbur,


              Armitage  conocía  dolorosamente  qué  tipo  de


              manifestación esperar; pero no quería aumentar el



              temor de la gente de Dunwich dando algún indicio


              o  clave.  Esperaba  poder  vencerlo  sin  revelar  al


              mundo  qué  espantoso  monstruo  andaba  suelto.


              Cuando  las  sombras  se  hicieron  más  densas,  los








                                                           102
   97   98   99   100   101   102   103   104   105   106   107