Page 724 - La Patrulla Del Tiempo - Poul Anderson
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—Si eso sucedió la pasada noche —dijo—, no habéis
venido en ningún caballo terrestre para contárnoslo.
—Sabes quién soy —contestó él.
—¿Lo sé? —Levantó hacia él unos dedos doblados
como espolones. La voz se hizo más aguda—. Si sois en
verdad Wodan, se trata de un dios maldito, que no estaba
dispuesto o no podía ayudar a mis dos hijos en un
momento de necesidad.
—Calma, calma —le rogó Alawin, mientras miraba
avergonzado al Errante.
Este último dijo con suavidad:
—Lloro contigo. Pero la voluntad de Weard no debe
ser alterada. Y a medida que la historia de lo sucedido
llegue al oeste, descubriréis que yo estaba allí, e incluso
que salvé a Ermanarico. Sabed que frente al tiempo los
propios dioses están indefensos. Hice lo que estaba
destinado a hacer. Recordad que al enfrentarse al final
que estaba decidido para ellos, Hathawulf y Solbern
redimieron el honor de su casa, y ganaron para ellos
mismos un nombre que vivirá mientras lo haga su raza.
—Pero Ermanarico permanece sobre la tierra —soltó
Ulrica—. Alawin, el deber de la venganza ha pasado a ti.
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