Page 593 - Materia oscura - Blake Crouch
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Dejo el puro en mi taza de café y, al bajarme del
taburete, el agente desengancha con habilidad unas
esposas de su cinturón y las cierra en mis muñecas.
—¿Tiene algún arma o agujas? ¿Algo que pueda
hacerme daño o que debería saber que lleva encima?
—No, señor.
—¿Está bajo el efecto de alguna droga o medicación?
—No, señor.
Me cachea y después me coge del brazo.
Mientras caminamos hacia la entrada, los demás
clientes aplauden.
Tiene el coche aparcado justo enfrente.
Abre la puerta trasera y me dice que tenga cuidado
con la cabeza.
Es casi imposible meterse en un coche policial con
dignidad llevando las manos esposadas a la espalda.
El policía se pone al volante.
Se abrocha el cinturón, arranca el motor y sale hacia
la calle nevada.
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