Page 562 - Hijos del dios binario - David B Gil
P. 562

todo  va  bien,  no  hay  motivos  para  dudar  de


           François. Es un veterano de esta guerra.


                  Ella asintió y dio el primer sorbo de café. Eran


           algo  más  de  las  once  de  la  noche  y  las



           contraventanas  se  encontraban  completamente


           cerradas.  Sin  luz  exterior,  el  ático  de  Frank  se


           encontraba  sumido  en  una  media  penumbra  de


           fósforo verde, tan solo alimentada por la débil luz


           que  rezumaban  las  pantallas  colgadas  de  las


           paredes.  Un  proyector  holográfico  instalado  en


           algún punto indeterminado dibujaba en el espacio



           vacío cientos de sistemas solares, cúmulos estelares


           y nebulosas planetarias, cada uno girando según la


           cadencia  de  su  propio  reloj,  flotando  entre  los


           intersticios de aquella oscuridad que los envolvía.


                  —¿Cuándo  podré  hablar  con  mi  hija?  —


           preguntó Alicia con calma.


                  Daniel bebió un poco de café y consultó la hora.


                  —Aún  no  ha  amanecido  en  Tokio,  y  con  el


           desfase que debe de haberles producido el jet lag es



           posible  que  esta  sea  la  primera  noche  que  hayan


           dormido  bien.  Espera  un  par  de  horas  más,  en


           cuanto  hayamos  terminado  con  todo  esto,  podrás


           llamarla.


                  Intuía aquella respuesta, así que no insistió. Se


           recostó  en  el  sofá  y  se  sentó  sobre  las  piernas




                                                                                                            562
   557   558   559   560   561   562   563   564   565   566   567