Page 13 - 23 Hábitos Anti-Procrastinación Cómo dejar de ser perezoso y tener resultados en tu vida.
P. 13
HAP #2: Relaciona cada acción a una meta S.M.A.R.T
Excusa a eliminar: “No importa.”
Es fácil hacerse sabotaje en un día al no crear prioridades. El resultado final es que estás, a
menudo, enfocado en hacer actividades de poco valor que no generan resultados significantes.
En realidad, la estrategia más efectiva para superar la procrastinación es mejorar tu habilidad de
elegir qué proyectos deberían trabajarse y cuáles deberían evitarse.
Todos hemos hecho excusas para posponer cosas. Pero si te tomas el tiempo para explorar tus
pensamientos, verás que la mayoría de las excusas son debidas a sentimientos subconscientes de que
la tarea no es tan importante.
¿Cuál es la solución?
Es simple: Haz el hábito de relacionar cada tarea a una meta. Siempre que estés por comenzar
algo, pregúntate cuanto encaja en tus planes a largo plazo. Si está directamente atada a una meta
escrita, entonces toma tiempo para hacerlo. De cualquier modo, si un proyecto no se relaciona a una
meta, entonces, no tengas miedo de delegar o completamente eliminarla.
Establecer metas será tu arma secreta en la lucha contra la procrastinación. Saber lo que es
importante crea un marco para tu rutina diaria. Ya no estarás jamás paralizado en una tarea
específica. En lugar de ello, poncrás manos a la obra porque sabrás cómo encaja en tus planes a
largo plazo.
Puedes implementar este hábito estableciendo regularmente metas S.M.A.R.T. Lo que es un
acrónimo en inglés para: Specific (Específico), Measurable (Mensurable), Attainable (Alcanzable),
Relevant (Relevante) y Time-bound (Puntual).
Aquí está como funciona:
S: Specífic/Específico.
Estas son tus seis preguntas: quién, qué, dónde, cuándo, cuál, y por qué. Respondiendo a estas
preguntas te da una manera rápida de crear una meta clara con un resultado mensurable:
** Quién: ¿Quién está involucrado?
** Qué: ¿Qué quieres lograr?
** Dónde: ¿Dónde terminarás la meta?
** Cuándo: ¿Cuándo quieres hacerlo?
** Cuál: ¿Cuáles requerimientos y limitaciones pueden ponerse en tu camino?
** Por qué: ¿Por qué lo estás haciendo?
Aquí va un gran ejemplo de una meta específica:
“En Mayo 16, voy a entregar una presentación de 15 minutos a mi jefe, dando una actualización
al proyecto Nexus.”
Este ejemplo muestra una completa falta de ambigüedad. Al final del día 16 de mayo, sabrás si lo
lograste o no.
M: Measurable/Mensurable
El segundo aspecto del establecimiento de una meta S.M.A.R.T es crear una solución que pueda
ser medida. En algún punto, quieres saber –sin duda- que has logrado la meta.
Como un ejemplo, “dar un discurso” no es una solución mensurable. Por otro lado, “dar un
discurso de 15 minutos” es algo que puedes cuantificar. Ya sea que lo hagas o no.
Vuélvete ultra específico con tus metas. No solamente digas que aprenderás a hablar en público.
En lugar de eso, crea una serie de medidas que se enfoquen en tu desarrollo continuo.
A: Attainable/Alcanzable

