Page 91 - Primera Guerra Formica 02 - La Tierra En Llamas - Orson Scott Card
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La Tierra en llamas Orson Scott Card ‐ Aaron Johnston
gráfica del sistema cobró vida tras él. Apareció un
holograma de la nave fórmica, enorme e
impresionante—. Esto cambió nuestra misión. Esta
abominación. Nadie nos dio la orden de detenerlos.
Nosotros mismos nos dimos esa orden.
Técnicamente era una verdad a medias, ya que fue
la capitana de la nave minera Cavadora la que pidió a
Lem ayuda para detener a los fórmicos. Pero ¿qué
importaba? Lem había aceptado la invitación. Nadie
lo había obligado.
Volvió a pulsar el pad de muñeca. La nave fórmica
desapareció y aparecieron veinticinco rostros.
—Algunos pueden pensar que atacar a los
fórmicos fue un error, dado que perdimos a
veinticinco miembros de nuestra tripulación.
Veinticinco hombres buenos. Veinticinco futuros
esposos y padres.
Una mujer de las primeras filas se enjugó los ojos.
Buena señal, pensó Lem. Su verdadero propósito,
después de todo, no era el servicio funeral. Era volver
a tomar el mando de la nave, el verdadero mando, no
servir como comandante solo de nombre, sino hacer
cumplir sus órdenes, mantener la autoridad absoluta.
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