Page 162 - iIndependencia 1849-1856.
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162 Wenceslao Vega B.
barcos de guerra, dos franceses y un inglés en los cuales llegaron
sus cónsules respectivos e inmediatamente se les unió un barco de
guerra español que tenía a bordo el Cónsul español. Antes de que
ninguno de los cónsules mencionados bajar a tierra este gobierno
fue notificado por los cónsules francés e inglés acerca de las con-
diciones sobre las cuales habían de ser establecidas las relaciones
amistosas. Después de una calurosa discusión sobre la cuestión de
los saludos, en el curso de la cual Don Miguel Lavastida renunció
como Ministro de Relaciones Exteriores, antes que resignarse ante
las demandas citadas, los cónsules lograron todo lo que pedían.
El asunto principal, el pago de las <papeletas> de Báez fue lo
siguiente a tratar y las condiciones propuestas por los cónsules fue-
ron sustancialmente aceptadas. El gobierno dominicano legalizó
dichas papeletas y asumió la responsabilidad de pagar todas las
papeletas de Báez a ocho mil por doblón, en lugar de treinta y dos
mil, como había fijado el Congreso.11
Queriendo aprovechar la inestabilidad política dominicana,
y la ausencia de los cónsules en Santo Domingo, el Emperador
haitiano se dispuso a reorganizar de nuevo su ejército para otra
invasión, pero sus generales, quienes habían sufrido tantas des-
consideraciones suyas luego de cada fracaso, optaron por derro-
carlo en octubre de 1859 y lo enviaron al exilio. Lo sustituyó el
general Gefrrard, con lo que quedó abolida la monarquía y fue
restablecida la República en Haití.
La amenaza haitiana llegó ahí a su fin. Pocos días después de
asumir el mando en Haití, Gefrrard tomó la iniciativa de solucio-
nar el conflicto que ya llevaba 15 años. Así lo informó el Agente
comercial norteamericano a su gobierno el 21 de octubre de
1859:
Como consecuencia de la exitosa revolución que ha tenido
lugar en Haití, encabezada por Gefrrard, y que ha puesto final al
11 A. Lockward, Documentos para la historia, p. 342.

