Page 55 - Dimension De Milagros - Robert Sheckley
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—¡Vaya! —dijo Carmody, sinceramente
impresionado; era como una exhibición de fuegos de
artificio en el Parque de Chapultepec, en México, para el
día de Pascuas.
Mientras miraba, los fragmentos relumbrantes caían
a tierra y se extinguían en un océano formado para
recibirlos. Gallardetes multicolores de humo ondeaban y
se retorcían mezclándose unos con otros, haciendo sisear
las aguas profundas, que se convertían en vapor para
después elevarse en forma de extrañas nubes que se
disolvían en lluvia.
—¡Ayyy! —exclamó Carmody.
La lluvia caía inclinada; de pronto, se levantó un
viento que agolpó las aguas descendentes, tejiendo con
ellas una trama compacta hasta que la lluvia y el viento,
entremezclados, formaron un enorme tomado; su grueso
tronco, oscurecido y con fugaces reflejos plateados,
avanzó hacia Carmody siguiendo el rítmico
acompañamiento de truenos ensordecedores.
—¡Esto es demasiado! —chilló Carmody.
Cuando el tornado hubo llegado casi a sus pies, se
extinguió; el viento y la lluvia se elevaron hacia el cielo y
el trueno se debilitó hasta convertirse en un rugido
cargado de presagios. Empezó entonces a escucharse un
sonido de cuernos de caza y salmodias, sumado al
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