Page 4 - En los muros de Eryx - H.P. Lovecraft
P. 4
cortaba con facilidad, pero ni aun entonces
lograba ir más de prisa. Estas máscaras Carter de
oxígeno son demasiado pesadas: sólo llevarlas
puestas dejan medio agotado a un hombre
normal. La máscara Dubois, con depósito‐
esponja en vez de cilindros, proporciona un aire
igual de bueno con la mitad de peso.
El detector de cristales parecía funcionar bien, e
indicaba constantemente una dirección que
confirmaba el informe de Anderson. Es curioso
cómo funciona ese principio de afinidad, sin
ninguna de las imposturas del género de las
viejas «varitas de zahorí» terrestres. Debe de
haber un gran yacimiento de cristales dentro de
un área de unas mil millas, aunque supongo que
esos condenados hombres‐lagartos estarán al
acecho, vigilando. Puede que nos consideren
estúpidos por venir a Venus en busca de material,
igual que nosotros los consideramos a ellos por
arrastrarse en el karro cada vez que encuentran
un cristal, o por tener ese enorme ejemplar en un
pedestal, en su templo. Me gustaría que
adoptasen una nueva religión, dado que los
cristales no les sirven más que para rezar ante
ellos. Suprimida la teología, nos dejarían coger
cuantos quisiéramos; y aun cuando aprendiesen
4

