Page 276 - El Planeta Prohibido - Stuart W J
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—¡Padre! —exclamó Altaira.
Me apresté a retirar mi brazo. Pero ella no me dejó.
Morbius miró al sofá. Frunció la boca, se acercó y retiró
la manta que cubría la cara del doctor.
Lo contempló. Extendió una mano y tocó las sienes, en
el lugar de las marcas.
Luego dijo:
—¡Estúpido! ¡Estúpido y ciego! ¡Jugando con cosas
demasiado grandes para él!
Altaira se alejó algo de mí. Sabía lo que yo iba a hacer.
Me paré. Caminé hasta el sofá. Al pasar, rocé con el
hombro de Morbius. Volví a cubrir el rostro del doctor.
Me di vuelta y miré a Morbius, sin decir nada.
—¿Y por qué está usted aquí, comandante? —preguntó.
—Para llevarlo a usted de vuelta a la Tierra —respondí,
manteniendo mi vista fija en la suya—. Quiéralo o no.
—¿Y Altaira?
—Ella viene conmigo. Lo haría, en cualquier caso. —
Subrayé “cualquier”.
Entonces se movió. Fue hasta el escritorio y se detuvo al
lado de ella. Iba a irme tras él. Pero lo pensé mejor y me
quedé donde estaba.
Morbius miró a su hija y le dijo:
—Altaira, ¿te irías con este… este hombre?
—Sí, padre —respondió ella.
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