Page 556 - Hijos del dios binario - David B Gil
P. 556

añadió  en  voz  baja—:  Diría  que  sí,  que  Daniel


           Adelbert, a su modo, es un buen hombre. Pero mi


           consejo sigue siendo el mismo, no lo olvide. —Tras


           aquellas palabras, miró por encima del hombro de



           Alicia  y  levantó  la  voz—.  ¡Veo  que  por  fin  has


           decidido regresar con los vivos!


                  Daniel se había sentado en el sofá y se frotaba


           los ojos con gesto somnoliento.


                  —Ha  sido  el  olor  de  esa  tortilla  lo  que  me  ha


           despertado  —dijo  el  interpelado  entre  bostezos—.


           ¿Desde cuándo atiendes tan bien a tus invitados? A



           mí  nunca  me  has  preparado  comida,  tan  solo  me


           sirves ese matarratas que te gusta beber.


                  —Ah,  mon  ami,  cuando  tu  compañía  sea  tan


           grata como la de la encantadora Alicia, entonces te


           colmaré  de  manjares.  Mientras  tanto,  tendrás  que


           conformarte con matarratas.


                  Alicia  asistió  al  cruce  de  invectivas  con  gesto


           divertido,  hasta  que  Daniel,  que  ya  se  había


           levantado  y  se  aproximaba  a  la  mesa,  se  detuvo



           frente  a  ella.  La  observó  allí  sentada,  los  pies


           descalzos recogidos a un lado de la silla, su cabello


           castaño  libre  sobre  los  hombros  desnudos,  riendo


           despreocupada, y creyó descubrir a otra persona.


                  —¿Qué sucede? —preguntó ella.


                  Él sacudió la cabeza.




                                                                                                            556
   551   552   553   554   555   556   557   558   559   560   561