Page 291 - La Era Del Diamante - Neal Stephenson
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Cuando  salió  el  sol  Nell  exploró  el  Castillo


              Tenebroso, buscando la fuente de las voces, pero


              no encontró nada. Harv pasó todo el día cortando


              madera. El día antes, había cortado un tercio de los


              árboles, y ese día cortó otro tercio.


                  Esa noche, Nell volvió a oír las voces, pero esta


                  vez parecían gritar:


                 —¡Mira en los árboles! ¡Mira en los árboles!


                  A  la  mañana  siguiente,  se  acercó  al  grupo  de


              árboles que quedaba y lo exploró mientras Harv


              cortaba los últimos. Una vez más no encontró nado.


                  Ninguno de los dos durmió bien aquella noche,


              porque sabían que estaban quemando la madera


              restante,  y  que  la  siguiente  noche  no  podrían


              protegerse de los trolls. Nell volvió a oír las voces,


              y esta vez parecían gritar.


                 —¡Mira en los árboles! ¡Mira en los árboles!


                 Más tarde, cuando salió el sol, volvió a explorar


              de nuevo y encontró una cueva cuya entrada había


              sido sellada por los trolls. Cuando abrió la caverna,


              encontró cuatro muñecos: un dinosaurio, una oca,


              un  conejo  y  una  mujer  con  largo  pelo  púrpura.


              Pero  no  encontró  nada  vivo  que  pudiese  haber


              producido las voces.


                 Nell y Horv entraron en el Castillo Tenebroso esa


              noche y se encerraron en una habitación en lo alto


              de una torre y apoyaron muebles pesados contra


              la  puerta,  esperando  mantener  alejados  así  a  los


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