Page 848 - La Patrulla Del Tiempo - Poul Anderson
P. 848
Los hombres se movían de un lado a otro, salvajes
guerreros de más allá del río, populacho galo de este lado.
Más tranquilos eran los terratenientes armados bátavos y
sus vecinos cercanos; disciplinados eran los veteranos de
Civilis y Clásico. Aparte se apiñaban los abatidos
legionarios que habían sido traídos desde Novesium.
Durante el viaje habían soportado tales hostigamientos
que, al final, una de sus tropas de caballería lo mandó
todo al demonio, repudió el juramento de fidelidad al
Imperio galo y se marchó al sur para unirse a Roma.
Un pequeño conjunto de tiendas se encontraba
aislado cerca de la corriente. Ningún rebelde se
aventuraba a acercarse a menos de unos cuantos metros
a no ser que tuviese una buena razón, y en ese caso se
aproximaba en completo silencio. Soldados brúcteros
protegían sus cuatro esquinas, pero sólo como guardia de
honor. Lo que allí se guardaba era una gavilla de paja con
varias manzanas atadas en lo alto de un poste… del año
anterior, secas y sin brillo pero seguían siendo el
emblema de Nerha.
—¿De dónde vienes? —preguntó Everard.
Heidhin lo miró. La respuesta fue sibilante.
—Si vienes desde el este como afirmas, ya lo sabes.
848

