Page 696 - Limbo - Bernard Wolfe
P. 696
De tanto en tanto, mientras permanecía
sentado observando las competiciones, el óvalo
del estadio parecía convertirse en una gran
canastilla y en su interior veía a su hijo, a sí
mismo, con su madre e Irene inclinándose
solícitas y atentas sobre la postrada figura. Eso
aceleraba su pulso, hacía que respirara con más
rapidez, dilataba sus pupilas, casi como si acabara
de oír pisadas amenazadoras tras él y se
agazapara con la anticipación del golpe dado por
algún asaltante invisible... luego la sensación
desaparecía y se relajaba de nuevo, y las gotas de
sudor iban secándose poco a poco en su rostro.
Otras veces se incorporaba de pronto, saliendo
sobresaltado de su letargo, y hablaba en voz alta,
un vicio en el que había caído últimamente: —
Querían matarme. Han dado al mundo seis meses
de vida. ¿Qué significa todo eso?
En varias ocasiones le ocurrió que, cuando la
cámara de televisión se apartaba del campo y
enfocaba la tribuna oficial para ofrecer una
imagen de Vishinu, o de Dai, o de Theo, esa
imagen parecía desvanecerse, y con ella el
recuerdo de la automática y de la porra de goma
y de todo lo demás. Entonces su mente quedaba
vacía, sin siquiera los rastros de una percepción
696

