Page 193 - A La Deriva En El Mar De Las Lluvias - Varios Autores
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—Vale —dijo Joel—, en ese caso llevabas razón,


           para variar. Pero tampoco hacía falta que dieras ese


           espectáculo delante de nuestros amigos.




                  —Tú me corriges constantemente delante de ellos.


           ¿Insinúas que yo no puedo hacer lo mismo?




                  Aquí  estaba  la  línea  más  allá  de  la  cual


           obsesionarse  con  la  razón  dejaba  de  ser  algo



           intrínsecamente positivo. Cuando las únicas personas


           implicadas mantienen una relación íntima entre ellas,


           a menudo conviene anteponer otras prioridades a una


           búsqueda  clínica  de  la  verdad  que,  en  última


           instancia,  podría  resultar  incluso  perjudicial.  ¿Tan


           importante era dirimir a cuál de los dos se le había


           ocurrido  la  genial  idea  de  tomarse  aquellas



           vacaciones que a la postre resultaron ser un desastre?


           ¿Era  de  veras  imprescindible  determinar  a  qué


           miembro de una pareja se le olvidaba más veces hacer


           los recados que el otro le encomendaba? Yo no era


           ningún experto en asuntos de pareja, pero sabía lo que


           decían  los  consejeros  matrimoniales:  asignar  culpas


           no era la solución. Lo que deberían hacer las parejas,


           en cambio, era reconocer los sentimientos del otro y


           afrontar sus problemas en equipo.




                  A  continuación  hablé  con  una  representante  de


           Whetstone,  Erica  Meyers.  Al  principio  se  dedicó  a




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