Page 69 - A La Deriva En El Mar De Las Lluvias - Varios Autores
P. 69
El vestíbulo del hostal en el que nos alojamos,
como cabía esperar, está lleno de folletos sobre los
lugares de interés de la zona. La mayoría tiene que ver
con las brujas. De algún modo, lo chabacano de las
fotos y del lenguaje se las apaña para transmitir al
mismo tiempo indignación moral y fascinación
adolescente por lo oculto.
David, el encargado, quiere que veamos Ye Olde
Poppet Shoppe, con sus «Muñecas hechas por la bruja
oficial de Salem». Bridget Bishop, una de las veinte
ejecutadas durante los juicios por brujería de Salem,
fue condenada en parte gracias a una prueba
concluyente: en su sótano encontraron unos
«muñecos» con alfileres clavados.
Puede que fuera como yo, una chiflada, una mujer
adulta que jugaba con muñecas. Sólo pensar en visitar
una tienda de muñecas hace que se me revuelva el
estómago.
Mientras Brad le pregunta a David por
restaurantes y posibles descuentos subo a la
habitación. Para cuando él suba quiero estar dormida,
o al menos hacer como que estoy dormida. Tal vez
entonces me deje sola y pueda tener unos minutos
para pensar. Cuesta mucho pensar con la paroxetina.
69

