Page 1096 - La Estacion De La Calle Perdido - China Mieville
P. 1096

—Tejedora,  tenemos  que  irnos  —susurró.  La

            Tejedora lo interrumpió.

                ...ME  CANSO  Y  ME  HAGO  VIEJA  Y  FRÍA


            MUGRIENTA  Y  EMPEQUEÑEZCO...  decía  la  araña

            con voz tranquila... TRABAJAS CON PRECISIÓN TE

            LO CONCEDO PERO ESTE ROBO DE FANTASMAS


            DE  MI  ALMA  ME  DEJA  MELANCÓLICA  VEO

            PATRONES  EN  TODO  INCLUSO  EN  ESTAS  LAS


            VORACES QUIZÁ JUZGO DEPRISA Y LOS GUSTOS

            DESLIZANTES  TITUBEAN  Y  ALTERAN  Y  NO  ESTOY

            SEGURA... alzó un brillante puñado de intestinos frente


            a los ojos de Isaac y comenzó a apartarlos con gentiliza.

                —Créeme, Tejedora —dijo Isaac con voz teñida de


            urgencia—, era lo correcto. Hemos salvado la ciudad

            para  que  tú...  puedas  juzgar  y  tejer...  ahora  que  lo

            hemos  hecho.  Pero  tenemos  que  marcharnos  ahora,


            necesitamos  que  nos  ayudes.  Por  favor.  Sácanos  de

            aquí.

                —Isaac —siseó Derkhan—. No sé quiénes son esos


            cerdos que están viniendo, pero... pero no pertenecen a

            la milicia.

                Isaac lanzó una mirada de soslayo hacia los tejados.


            Sus ojos se abrieron, llenos de incredulidad.

                Acercándose  a  ellos  con  grandes  y  ruidosos  pasos


            había  una  batería  de  extraordinarios  soldados  de

            metal. La luz se deslizaba sobre ellos, iluminando sus




                                                           1096
   1091   1092   1093   1094   1095   1096   1097   1098   1099   1100   1101