Page 136 - Enemigo Mío - Barry B. Longyear
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Fyrine IV flotaba en mis pensamientos, el océano
encolerizado, los vientos eternos. Frené al borde de la
carretera y apagué las luces. Al cabo de unos instantes, mis
ojos se amoldaron a la oscuridad, salí afuera y cerré la puerta.
Kansas tenía un cielo enorme, y las estrellas parecían
estar al alcance de la mano. La nieve crujió bajo mis pies
cuando alcé la mirada, intentando localizar a Fyrine entre los
millares de estrellas visibles. Fyrine está en la constelación de
Pegaso, pero mis ojos no tenían la práctica necesaria para
captar el caballo al lado entre las estrellas que lo rodean. Me
encogí de hombros, sentí un escalofrío y decidí volver a
entrar en el coche. Al poner la mano en el tirador de la
puerta, vi una constelación que reconocí. Hacia el norte;
colgado justo por encima del horizonte: Draco. El Dragón,
con su cola retorcida rodeando a la Osa Menor, pendía
invertido en el cielo. Eltanin, la nariz del Dragón, era el hogar
de Zammis.
Los faros de un automóvil que se acercaba me cegaron, y
me volví hacia el vehículo, que frenó hasta detenerse. La
ventanilla del lado del conductor se abrió y alguien habló en
la oscuridad.
—¿Necesita ayuda?
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