Page 123 - El Planeta Prohibido - Stuart W J
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no así en otros aspectos. No soy gran cosa como actor y, sin

         embargo, eso era lo que necesitaba ser. Vigilando a Jerry con

         un  ojo  y  con  el  otro  a  Morbius,  siendo  sociable  en  todo

         momento.  El  doctor  me  ayudó  respecto  a  Jerry;  pero,  de


         todos  modos,  no  podía  dejárselo  por  completo  a  él.  El

         Astronavegador de Primera Clase, Teniente Gerald Farman,

         es un hábil operador. Deseé que las cosas fueran de otro

         modo. Altaira, por ejemplo. Quizás así no hubiera tenido yo


         que  luchar  constantemente  para  evitar  enfurecerme.  No

         podía comprender mis propios sentimientos y eso no me

         ayudaba. Traté de ser atento con ella, por lo menos; pero,


         cada vez que lo intentaba, ella estaba distraída en otra cosa,

         o Jerry le estaba dispensando alguna atención.

                La mayor parte del tiempo no resultaba posible concebir


         que no hubiera conocido otro ser humano que su padre. Ella

         parecía tan… tan equilibrada. Pero, de pronto, decía algo, o

         reaccionaba en una forma que demostraba que tenía que ser

         cierto.  No  quiero  decir  que  resultara  infantil.  Todo  al


         contrario;  sabía  mucho  más  que  la  mayoría  de  las

         muchachas de su edad en la Tierra. Era… bueno, no lo sé. El

         doctor tal vez lo hubiera expresado en los términos exactos,

         pero yo no.


                “Sincera”  era  la  palabra  que  me  daba  vueltas  en  la

         cabeza, pero no me parecía dar la idea exacta de lo que yo

         quería significar. La muchacha aparentaba ser incapaz de





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