Page 380 - La Constelación Del Perro - Peter Heller
P. 380
acababa de echar. No nos hacían falta para llegar
a Junction y nos ahorrarían casi treinta y tres
kilos. Luego pensé: Mejor no apurar tanto, y volví
a subir por el montante para añadir unos ocho
litros, a ojo. Dejé un bidón lleno entre la maleza y
vacié el otro en el suelo y luego lo volví a guardar
en la Bestia. Después me fui a pescar. Saqué la
funda de la caña del soporte de la parte de atrás
de mi asiento y cogí la mochila ligera de nailon
con la caja de moscas y el tippet y me volví al
cañón.
Mis cálculos indicaban que la mejor manera
de tener al menos alguna posibilidad de
despegar, de superar los árboles, era dejar al
viejo en tierra.
Ya me imaginaba lo bien que se lo iban a
tomar. Me imaginaba la conversación. Casi podía
oír el sonido de su cuchillo de monte al salir de la
funda de plástico, el gritito que yo soltaría al
sentir la punta de la hoja en la garganta. ¡A mí no
me vengas con chorradas, Higs! ¡Ya te avisé de
que no intentases engañarme!
Pesqué cinco carpas. Arrastré una ninfa en
cola de faisán por el fondo y fui sacándolas con
380

