Page 198 - Un Mundo Fuera Del Tiempo - Larry Niven
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Larry Niven Un mundo fuera del tiempo
—Me sentí amargada, Corbell. Creía que era
por mi culpa, por lo que yo había hecho. Pensé
que todos los planetas sabrían de mi traición y
que no había esperanzas para mí. Regresé al
sistema solar para morir en él.
Ya había reconocido ciertas estrellas en la
vecindad del Sol. Allí no le dispararon, pero el
Sol se expandía hacia el estado de gigante roja y
faltaba la Tierra. Mirelly‐Lyra, pasmada,
investigó más a fondo.
Reconoció a Saturno y a Mercurio
(gravemente dañado por las operaciones
mineras, tal como ella lo había dejado); a Venus,
que mostraba las señales de un infructuoso
intento de transformarlo en planeta terrestre.
Urano describía una órbita muy alterada entre
Saturno y Júpiter, si es que se trataba de Urano.
Marte presentaba una grieta tremenda, un mar
nuevo, tal vez dejado por el impacto de Deimos.
—El Estado pensaba cambiar de sitio a
Deimos —le explicó a Corbell—. Estaba
demasiado cerca. Pudo ocurrir algo.
Descubrió a la Tierra en órbita interior a la de
Marte. Corbell preguntó:
—¿Tienes idea de cómo pudo ocurrir eso?
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