Page 668 - Herederos del tiempo - Adrian Tchaikovsky
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—¿Habéis hecho que otros clasicistas del
cargamento trabajen en esto? Debe haber algunos
estudiantes, o…
Alpash lo miró con solemnidad.
—Me temo que no. Hemos revisado el
manifiesto. Al comienzo solo había muy pocos.
Tú eres el último.
Holsten se lo quedó mirando un largo rato,
repasando mentalmente las implicaciones:
pensando en la larga historia de la Tierra antes de
la caída, antes de la llegada del hielo. Su sociedad
había poseído un conocimiento fragmentario e
imperfecto de los antecesores que
constantemente trataban de imitar, y, ¿acaso ese
escaso registro se limitaba ahora a él mismo, al
contenido de la cabeza de un viejo? Toda esa
historia y… cuando yo muera… No se imaginaba
que nadie tuviera tiempo para asistir a clases de
historia en el Edén de lucha por la supervivencia
de Karst.
Se estremeció, no por la habitual sensación
humana de la propia mortalidad, sino por un
sentimiento de cosas vastas e invisibles que caían
en el olvido, irrecuperables e irreemplazables.
Sombríamente, se encaró con los mensajes que
Alpash le estaba mostrando.
Tras dedicarle un poco de trabajo, Holsten
consiguió descifrar el monitor lo suficiente como
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