Page 863 - La Patrulla Del Tiempo - Poul Anderson
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y asesinaron a los que estaban dentro. Sus compañeros

           arrojaron rezones a los barcos y los hundieron. El gran


           premio fue el trirreme petroriano donde Cerial debería de

           haber estado durmiendo. Por casualidad, se encontraba

           en otra parte —con una mujer ubia, según los rumores—


           y  salió  medio  dormido  y  casi  desnudo  para  tomar  el

           mando.



                 Sólo fue una acción sorpresa. Sin duda su principal

           resultado            fue       que         los      romanos             se       volvieron

           inmediatamente más precavidos. Los germanos llevaron


           el trirreme capturado por el río Lippe y se lo ofrecieron a

           Veleda.



                 Por  pequeño  que  fuese,  ese  revés  para  la  causa

           imperial podría haberse considerado un presagio. Cerial


           se internó más en la tierra de las tribus. Ninguna podía

           oponérsele.  Pero  tampoco  conseguía  él  enfrentarse

           definitivamente con sus enemigos. Roma no podía darle

           más tropas. Los suministros eran  escasos  e irregulares.


           Mientras tanto, sobre él se cernía el invierno del norte.



















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