Page 357 - El largo viaje a un pequeño planeta iracundo - Becky Chambers
P. 357

Rosemary se llevó la mano a la boca.



          —Lo  siento  —dijo.  Un  gesto  humano  por


          antonomasia,  expresar  tristeza  a  través  de  una

          disculpa.



          —Yo  no  —contestó  él—.  Fue  cosa  nuestra.  Nuestra


          extinción no ocurrió a causa de un desastre natural, o


          el  lento  reptar  de  la  evolución.  Nos  matamos  a

          nosotros mismos. —Pensó en voz alta unos instantes,


          ordenando  las  piezas—.  Durante  generaciones,  mi


          especie estuvo en guerra contra sí misma. Ni siquiera

          puedo decir por qué. Hay historiadores con todo tipo


          de teorías e ideas, claro. Pero es la misma historia que


          te  cuentan  en  todas  partes.  Diferentes  creencias,


          diferentes culturas, territorios que todos querían. Yo

          nací en medio de esa guerra. Y cuando estuve listo,


          ocupé mi lugar como doctor.



          »No era la clase de doctor que soy ahora. No me volví


          amigo de mis pacientes. No tenía largas charlas con

          ellos sobre sus dietas o sobre a qué tipo de inmubots


          deberían  actualizarse.  Mi  trabajo  era  coser  a  los


          soldados moribundos lo más rápido posible para que

          pudieran volver a levantarse y salir ahí fuera a seguir


          matando.



          »Hacia  el  final,  los  forasteros,  así  es  como  más  o


          menos  llamábamos  a  los  otros,  empezaron  a  usar

          unos  proyectiles  llamados…  —Tarareó  mientras


          pensaba, tratando de encontrar un análogo en klip—.


          Cortaórganos.  Como  ves,  los  forasteros  se  habían







                                                                                                            356
   352   353   354   355   356   357   358   359   360   361   362