Page 283 - Vienen cuando hace frio - Carlos Sisi
P. 283
de alguna parte, cerca del techo. Estaban mohosas
y débiles en apariencia.
—O quizá los alaskos —continuó diciendo Joe.
—¿Quiénes?
—Pete mencionó un grupo de soldados durante la
Revolución Republicana Rusa. Unos trescientos,
me parece. Se escondieron aquí, al parecer. Se
mataron todos.
—Oh. Sí, me lo contaste.
Joe asintió sin que nadie viese el movimiento.
—Dime una cosa —dijo Allen—. ¿Cómo pudieron
construir todo esto sin que les afectase…? Bueno, ya
sabes.
Joe pestañeó. Era una buena pregunta. Lo cierto es
que había conseguido aparcar de alguna manera
aquella sensación de odio profundo; ahora era más
bien un desasosiego constante, una sensación de
alerta que le hacía tensar los músculos de las
piernas incluso sin darse cuenta. Cómo lo habían
conseguido, no lo sabía; quizá llevaban poco
tiempo, quizá el mero hecho de saber que la cueva
era mucho más que una simple cueva era bastante
para, de manera inconsciente, estar alerta y filtrar
los impulsos. Pero el Pozo seguía emitiendo, sin
duda, como una vieja emisora que se obceca en
282

