Page 279 - Vienen cuando hace frio - Carlos Sisi
P. 279

Allen  asintió.  Miró  hacia  arriba.  Las  marañas  de


            algas  sobre  su  cabeza,  a  la  luz  de  la  linterna,  se


            asemejaban a los cabellos retorcidos y ásperos de la


            cabellera  de  la  tradicional  bruja  de  cuento.  Allen


            sintió un asco repentino. Casi esperaba que fuesen


            a volverse mostrando un rostro cadavérico y hostil.



            —¿Qué son estas… plantas? —preguntó Allen.




            —No lo sé… Algún tipo de… hongos.



            —¿A esta altura?



            De pronto, Joe lanzó el brazo hacia Allen y detuvo


            su avance. Allen dio un respingo, sobresaltado. El


            haz  de  la  linterna,  descontrolado,  comenzó  a



            ofrecer instantáneas fugaces de varios ángulos de


            paredes y techos.



            —¡Joder! —exclamó Allen.



            Joe iluminaba el suelo a sus pies. Allen miró, con la


            respiración  todavía  desbocada,  y  vio  un  agujero



            oscuro que se abría ante él, profundo y negro como


            el petróleo. Allen dirigió su propia linterna hacia él


            y  palideció  cuando  descubrió  que  se  abría  en  la


            tierra como un túnel, sin que llegara a vislumbrarse


            el fondo. Debía tener medio metro de lado a lado.


            De  haber  dado  un  solo  paso  más,  se  lo  habría


            tragado.










                                                                                                          278
   274   275   276   277   278   279   280   281   282   283   284