Page 27 - La Nave - Tomas Salvador
P. 27
lo mismo que la célula cancerosa llamada «La
Carne» sigue reproduciendo el tejido conectivo
llamado proteína de nuestro alimento graso.
Debo testimoniar que las Leyes se siguen
cumpliendo y que todos nosotros —con la posible
excepción de los wit— obedecemos las normas que
desde hace mucho tiempo constituyen el cuerpo
social de nuestra organización, sin que sepamos
quiénes las dictaron y cuál es su utilidad.
Debo testimoniar, en fin, que seguimos en la Nave.
Ignoro desde cuándo y hasta cuándo, si bien es
cierto que existen algunas tradiciones cuya verdad
absoluta nunca hemos comprobado. No quiero
anotar teorías confusas, en esta hora de
responsabilidad, y por lo tanto inscribo,
sencillamente, que la generación XXIII vive en este
cuerpo autárquico llamado Nave.
Repasando lo que he escrito en mi primera
anotación, encuentro que lo que me costó mucho
concretar apenas significa nada. Son verdades tan
evidentes como que existimos y estamos en la Nave.
Seguramente que cada antecesor mío en el Libro
debió anotar lo mismo y hacerse igual reflexión.
Puedo leer el Libro desde sus primeras
inscripciones y enterarme así de muchas cosas. La
Ley no me lo prohibe taxativamente, pero sí castiga
27

