Page 390 - Anatema - Neal Stephenson
P. 390
búsqueda era un sótano abovedado donde, según la
leyenda, el linaje de Shuf había guardado su oro. Si ese
lugar había existido, habría sido encontrado y limpiado
durante el Tercer Saqueo. Pero sería interesante volver a
dar con él. También sería una bendición para los AFR, ya
que, en los últimos años, los avotos de otras órdenes se
habían entretenido propagando el rumor de que los AFR
habían encontrado o acumulaban tesoros allá abajo.
Arsibalt podría acabar con ese rumor si daba con el sótano
y luego invitaba a la gente a visitarlo.
Pero no había prisa —tratándose de él, nunca la había—,
y nadie esperaba resultados antes de que Arsibalt tuviese
el pelo cano. De vez en cuando se le veía recorrer el puente
sucio de tierra y llenaba el baño de cieno, por lo que
sabíamos que había realizado otra expedición.
Así que me sorprendí cuando me guio escaleras abajo,
giró a la izquierda en lugar de a la derecha, me hizo doblar
por lugares que parecían demasiado estrechos para él y
me mostró una placa oxidada en el suelo de una estancia
sucia que olía a humedad. La levantó para dejar al
descubierto una cavidad y una escalera de aluminio que
había birlado de algún otro punto del concento.
—Me vi obligado a serrarle las patas… un poco —me
confesó—, porque el techo es un poco bajo. Tú primero.
La legendaria cámara del tesoro resultó tener
aproximadamente un brazo de ancho por uno de alto. El
suelo era de tierra. Arsibalt había extendido una polilona
390

