Page 465 - Hijos del dios binario - David B Gil
P. 465

mejor, que me voy a abrir a usted? ¿Cree que sus


           técnicas baratas de empatía le van a dar resultado?


                  —Tranquilícese,  solo  intento  comprender  las


           motivaciones  de  la  persona  con  la  que  voy  a



           trabajar. Es bueno conocer a quien tienes al lado, te


           evita sorpresas desagradables.


                  —¿Sí?  ¿Y  cuáles  son  sus  motivaciones?  —


           preguntó  ella  con  desdén  indisimulado—.  El


           dinero, supongo.


                  —Lo  dice  como  si  eso  fuera  malo.  El  dinero


           mueve  el  mundo.  Hay  pocas  cosas  que  alienten



           más el corazón humano.


                  —¿Eso cree? Se me ocurren unas cuantas.


                  —Por supuesto: el amor, el miedo, el instinto de


           supervivencia... Pero todas ellas son excepcionales,


           se  cruzan  pocas  veces  en  tu  vida.  El  dinero,  sin


           embargo,  corre  por  nuestras  venas.  Es  el


           combustible  que  mueve  el  mundo;  si  el  planeta


           girara con amor, créame, hace tiempo que se habría


           salido de su órbita.



                  —Así que va de eso, es un cínico que se justifica


           en su visión de las cosas.


                  Él  sonrió  abiertamente.  Parecía  encontrar  algo


           gracioso en sus palabras.


                  —Borre  esa  expresión  condescendiente,  joder.


           No soy ninguna niña.




                                                                                                            465
   460   461   462   463   464   465   466   467   468   469   470