Page 531 - Hijos del dios binario - David B Gil
P. 531
—Sé que hay pocas noticias más apabullantes
para la psique humana —dijo el agente Knocht con
voz comprensiva—. La muerte como certeza
inminente es algo terrible. Pero le ofrezco la
posibilidad de elegir cómo afrontarla; hay hombres
mucho mejores que usted que no han tenido esa
oportunidad, señor Girard.
El interpelado respiró hondo y miró de soslayo
hacia la puerta de su apartamento. A continuación
miró la pistola que colgaba a un costado de su
captor. No estaba atado, sus únicas ligaduras eran
el profundo miedo que atenazaba su mente, pero
estaba seguro de que si intentaba escapar, aquel
sicario le fulminaría de un tiro antes de dar dos
pasos. Al menos eso sería una muerte rápida... A
no ser, claro, que apuntara a algún órgano no vital.
Entonces tan solo sería el principio de una larga
agonía.
—No le diré nada.
Y sus palabras se proyectaron frente a él
invertidas como en un espejo, en un tenue color
rojo, muy diferente al azul profundo que el
traductor había asignado a su interlocutor.
Tal aseveración, sin embargo, tan solo provocó
una escueta sonrisa en el hombre sentado al otro
lado de la mesa.
531

