Page 406 - La Constelación Del Perro - Peter Heller
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animales, muy cerca, y los miraba a los ojos y me
transmitían algo que no era capaz de nombrar,
pero al despertar me sentía imbuido de algo
fuerte y aterrador y quizá hermoso. Me sentía
afortunado.
Una tarde casi sin viento, tumbado en la
hamaca, soñé que Melissa y yo estábamos
cazando con arco. Ella nunca cazaba con arco,
pero yo sí. Si entre dos trabajos me quedaba
tiempo para salir antes y disfrutar de una
temporada más larga, me sacaba un permiso de
caza con arco. En el sueño no cazábamos
aquellos felinos, sino una de esas raras cabras
monteses que se extinguieron hace mucho
tiempo en las estribaciones del Himalaya, y
cuando ella apuntaba con el arco tensado a un
macho grande, desde muy cerca, yo le gritaba
¡NO! y el animal pegaba un salto y echaba a
correr y ella se volvía hacia mí con la cara
encendida de furia por mi traición. Cuando me
desperté estaba agarrando la cuerda de la
hamaca y tardé un rato en darme cuenta de
dónde me encontraba, de que era un sueño, y
luego casi sentí vértigo al pensar: Esto es un
sueño, y algo de alivio por estar en este y no en
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