Page 976 - Kraken - China Mieville
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¿Cómo se puede ocultar a los cielos algo del
tamaño de un camión? La indecisión de Fitch lo
protegió por un tiempo: incapaz de
comprometerse con sus hermanas y hermanos en
lucha, y tampoco de abandonarlos a su suerte,
había permanecido a menos de un kilómetro de
distancia y ordenado que el vehículo entrara en un
túnel, y allí, a la luz de los fluorescentes, bajo el
pavimento, había puesto las luces de emergencia,
como si estuviera estacionado. Y esperó, mientras
los refugiados de aquella noche pasaban en
oleadas en sus coches. Cuando Saira envió su
mensaje, él, Londres, no tuvo que ir demasiado
lejos para comunicarlo.
Mientras, por encima de sus cabezas, se
deslizaban los yos exploradores entintados de
Grisamentum, ella y Billy corrieron hacia el
refugio del vehículo, dejando atrás cagadas de
pájaro y carteles que anunciaban discos y
exposiciones. Reúnete con nosotros, le había dicho
Saira. Te necesitamos. Avergonzado, Fitch tenía la
pistola de aire comprimido, y emergió de su
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