Page 308 - El Jardin De Las Delicias - Ian Watson
P. 308

do proyectada? En realidad las personas no podían

               transmutarse en pájaros y en bestias (al menos, no

               habitualmente), ya que de lo contrario el mundo no


               estaría tan poblado. Pues, si bien podía considerar‐

               se  escasamente  poblado  en  un  sentido,  por  otra

               parte la población era, sin duda, mucho más nume‐


               rosa que el grupo de colonos y la cantidad de óvu‐

               los fecundados que llevaba la Copernicus. Aunque

               posiblemente los mamíferos y las aves también se


               transmutaban en humanos... El unicornio y el leo‐

               pardo, la garza y el alcaudón ciertamente parecían


               obedecer a propósitos y motivos más amplios que

               los meramente animales... ¿Porque evolucionaban?

               ¿Porque  personificaban  ideas?  ¿O  porque  eran  ya


               actores conscientes y despiertos bajo el disfraz bos‐

               quiano? Y en tal caso, ¿quiénes eran?


                      Sean arrancó el listado de la epístola, pero esta

               vez se lo guardó en el bolsillo superior de la cha‐

               queta.


                      ¡De nuevo aquella voz!



                                                   Cuarta Epístola:


                                           El Dios de la Singularidad



                      Dios es muy singular porque es Uno, lo mismo que


               sólo  existe  un  universo  en  cualquier  momento  dado.

               ¿Pero tal vez hay otros universos coexistentes? En cuyo



                                                           308
   303   304   305   306   307   308   309   310   311   312   313