Page 464 - Una orbita cerrada y compartida - Becky Chambers
P. 464
vivir toda su vida en una de aquellas ciudades y
jamás enterarse de lo feo que era todo en otro lugar.
—¿Por qué? —susurró—. ¿Por qué lo hacéis? ¿Cómo
podéis?
Jane se apoyó en la pared, respirando con dificultad.
Tenía la cabeza embotada, pero no era por el
despegue, ni la falsa gravedad ni nada de eso. Todo
era demasiado. Demasiado. El planeta era hermoso.
El planeta también era horrendo. El planeta estaba
lleno de gente hermosa y horrenda. Lo habían dejado
todo hecho un desastre, y ahora ella se iba y no iba a
volver jamás.
Se tambaleó hasta el sofá y enterró el rostro en las
manos. Quería gritar y reír y dormir, todo a la vez.
De repente, Laurian estuvo a su lado, sentado cerca
pero sin tocarla. No dijo nada, pero de algún modo,
Jane supo que no era por su problema para hablar.
No dijo una palabra porque no había nada que decir.
Jane volvió a mirar hacia la pantalla. Vio los satélites
ahí fuera, titilando a la luz del sol. Los vio
reorientarse hacia su nave.
—¿Seguro que no tenemos que preocuparnos de
nada? —murmuró.
Laurian asintió. Dibujó una curva con la mano y
señaló hacia abajo con el dedo índice. Jane entendió.
464

