Page 102 - Limbo - Bernard Wolfe
P. 102

habían  recorrido  un  largo  camino,  sus  barrigas



            estaban vacías, tenían pocas mujeres pero muchas


            relucientes  cimitarras,  la  vieja  historia.  Cabezas


            cercenadas,  violaciones,  esclavitud.  Luego  las


            cosas  estuvieron  tranquilas  durante  algunas


            generaciones,  y  la  población  creció  tan


            rápidamente  que  se  estableció  un  segundo


            poblado. Pero pronto empezó a crearse la mala



            sangre  entre  los  dos  poblados:  cada  jefe


            proclamaba  que  el  otro  estaba  planeando


            asesinarlo  y  apoderarse  de  su  poblado.  Los


            esclavos  en  ambos  poblados  fueron  puestos  a


            trabajar haciendo más lanzas y bolos.


                  Trabajando  lado  a  lado  durante  el  día,



            tendidos lado a lado en sus chozas por la noche,


            los aterrados esclavos hablaron de lo que estaba


            pasando  e  intentaron  evaluarlo  en  términos  de


            sus pasadas experiencias. Tenían mucho de qué


            hablar:  en  las  venas  de  cada  esclavo  corría  la


            sangre  lastrada  de  culpa  de  tres  invasiones.  Y


            como  resultado  de  su  secreto  musitar  y  sus



            comunicaciones  nocturnas,  una  idea  radical


            empezó  a  tomar  raíces  en  las  mentes  llenas  de


            culpabilidad  de  los  esclavos:  que  aquello  de  lo


            que  sus  antepasados  habían  estado  huyendo


            durante  siglos  era  algo  de  lo  que  no  podía



                                                                                                      102
   97   98   99   100   101   102   103   104   105   106   107