Page 626 - Limbo - Bernard Wolfe
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una  cortina,  era  una  lámina  de  mica



            resplandeciendo a la luz de la luna, exactamente


            tal  como  lo  recordaba.  Y  allí,  en  la  pequeña


            arboleda más allá de la cual se erguía la montaña,


            estaba la cabaña.



                  Cuando apuntó la linterna hacia ella vio que


            no había sido usada desde hacía mucho tiempo:


            la mayor parte de las ventanas estaban rotas, la


            chimenea  de  ladrillos  se  había  derrumbado,  un


            árbol había caído sobre el porche, rompiendo el


            débil  tejadillo.  Había  posibilidades  de  estar  a


            salvo allí, al menos por un tiempo. Cinco o seis


            meses de todos  modos, con suerte.



                  Ahora hacía frío, se estremeció bajo sus ligeras


            ropas,  pero  estaba  bien  preparado  para  eso.


            Estaba  a  salvo,  de  todo  excepto  de  sus


            pensamientos.                     Durante               algún            tiempo             se


            proporcionaría  su  propio  pastel  de  chocolate



            enlatado  y  leche  evaporada,  manejaría  sus


            propios  orinales,  cuidaría  sus  sueños  de


            omnipotencia,  temblaría  en  sus  pesadillas  de


            impotencia, el arquetípico hombre de la frontera


            cabalgando su caballo (electrónico), huyendo de


            sus  mujeres.  Pero  la  cabaña  de  troncos  del


            cazador  era  solamente  un  cochecito  de  niño


            ligeramente  camuflado.  Ahora,  realmente,  huía



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