Page 222 - A La Deriva En El Mar De Las Lluvias - Varios Autores
P. 222

caso,  constituyen  un  reflejo  de  nuestras  respectivas


           personalidades.  Puesto  que  cada  uno  de  nosotros


           repara en los detalles que más le llaman la atención en


           cada momento y solo registra en su memoria lo que



           considera  importante,  las  crónicas  que  elaboramos


           contribuyen  a  moldear  nuestra  personalidad  y


           conferirle un carácter exclusivo.




                  Pero, me pregunto, si todo el mundo se acordara


           de  todo,  ¿eliminaría  eso  nuestras  diferencias?  ¿Qué


           ocurriría con nuestro sentido del yo? Sospecho que


           una memoria perfecta no podría dar lugar a ninguna


           crónica;  del  mismo  modo  que  la  grabación  de  una



           cámara  de  seguridad,  sin  ningún  tipo  de  edición,


           tampoco podría compararse con una película.








                  Jijingi contaba veinte años de edad cuando llegó a



           la aldea un representante de la administración para


           entrevistarse con Sabe. Lo acompañaba un joven tiv,


           alumno  del  colegio  misionero  de  Katsina‐Ala.  La


           administración  quería  tener  constancia  escrita  de


           todas  las  disputas  que  se  dirimieran  en  los  juicios


           tribales,  de  modo  que  iban  a  asignar  uno  de  estos


           muchachos  a  cada  líder,  para  que  desempeñase  las


           labores  de  escriba.  Tras  pedirle  a  Jijingi  que  se


           acercara, Sabe le dijo al agente:




                                                                                                               222
   217   218   219   220   221   222   223   224   225   226   227