Page 162 - El Jugador - Iain M. Banks
P. 162

pesadilla y el tiempo no había corrido hacia atrás. Todo

            lo que había sucedido seguía siendo real.


                  Cogió  un  vehículo  subterráneo  y  fue  a  Celleck,  la

            aldea  en  la  que  Chamlis  Amalk‐Ney  vivía  envuelto  en

            una extraña y anticuada aproximación a la domesticidad


            humana hecha de cuadros, muebles antiguos, paredes de

            piedra arenisca, peceras y terrarios de insectos.

                  `


                  > > >

                  `

                  ‐‐Averiguaré cuanto pueda, Gurgeh. ‐‐Chamlis lanzó

            un suspiro y se puso junto a él para observar la plaza‐‐.


            Pero no puedo garantizarte que lo consiga sin que quien

            estaba detrás de la misteriosa visita de Contacto se entere

            de ello. Quizá crean que te interesa su oferta.

                  ‐‐Quizá me interese ‐‐dijo Gurgeh‐‐. Puede que quiera


            volver a hablar con ellos. No lo sé.

                  ‐‐Bueno,  ya  he  enviado  el  mensaje  a  mis  amigos,

            pero...


                  Y  de  repente  Gurgeh  tuvo  una  idea  muy  extraña  y

            francamente paranoica. Se volvió hacia Chamlis.

                  ‐‐Esos amigos tuyos... ¿Alguno es una nave?


                  ‐‐Sí, los dos ‐‐dijo Chamlis.

                  ‐‐¿Cuáles son sus nombres?






                                                                                                         161
   157   158   159   160   161   162   163   164   165   166   167