Page 557 - El Jugador - Iain M. Banks
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pero Contacto lo había prohibido ‐‐el efecto que tendría

            sobre el Almirantazgo el descubrimiento de que algo no


            más grande que un bote salvavidas era capaz de igualar

            a sus cruceros de batalla habría sido tan terrible que no

            podía ni ser tomado en consideración‐‐, y el Imperio se


            negó a permitir que la máquina alienígena viajara dentro

            de un navío imperial. Gurgeh tendría que hacer el viaje

            con la Flota, igual que todos los demás.


                  ‐‐Y tú crees tener problemas ‐‐dijo Flere‐Imsaho con

            amargura‐‐.  Nos  estarán  observando  continuamente,  a

            bordo  de  la  nave  durante  el  viaje  y  una  vez  hayamos

            llegado  al  castillo.  Eso  quiere  decir  que  deberé


            permanecer dentro de este ridículo disfraz día y noche

            hasta el final de los juegos. ¿Por qué no pudiste dejar que

            te eliminaran en la primera ronda tal y como se suponía

            que iba a ocurrir? Podríamos haberles explicado con toda


            clase de detalles en qué sitio debían meterse su Planeta de

            Fuego, y a estas alturas ya estaríamos a bordo de un VGS.

                  ‐‐Oh, cállate, máquina.


                  No  tardaron  en  descubrir  que  podrían  haber

            prescindido del regreso al módulo, pues no había nada

            más que recoger. Gurgeh se quedó inmóvil en el centro


            de  la  salita  contemplando  lo  que  le  rodeaba  mientras

            acariciaba  su  brazalete  Orbital,  y  comprendió  que  su






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