Page 244 - El Planeta Prohibido - Stuart W J
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De repente, experimenté la necesidad de hablar con el
doctor y con Altaira, acerca de eso. Pero después recordé
que ella no conocía a Alonso, no había jamás posado sus ojos
en él…
III
A las siete se efectuó la ceremonia fúnebre, de acuerdo
con la Versión Abreviada para Servicio Activo de
Emergencia. Mientras leía el oficio, sentí descomponérseme
el estómago. Lo cual fué curioso. Antes me había parecido
que aquellas palabras eran acertadísimas.
Farman y el contramaestre bajaron el saco conteniendo
los despojos, a la tumba y yo impartí la orden para una
doble salva de artillería.
Y todo terminó. Alonso Quinn se acabó.
Hice que el contramaestre y dos hombres rellenaran la
fosa con arena y colocaran la lápida, mientras Jerry
mantenía al resto en formación, frente a la planchada, para
que yo les hablara.
Subí y los recorrí con la mirada. Tenían buen aspecto.
Tenían ese aire recio que adoptan los buenos veteranos del
espacio cuando se encuentran en dificultades y dispuestos a
pelear frente a ellas.
Les hablé bien claro. Les dije bastante de lo que estaba
sucediendo y de cómo nuestra tarea consistía es llevar de
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