Page 246 - El Planeta Prohibido - Stuart W J
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—Ostrow respondiendo llamada —pero no enfoque de

         su cámara.

                —¿Qué pasa? —le pregunté y me contestó:

                —Nada.


                Le  hice  notar  entonces  cuánto  me  había  costado

         comunicarme con él y le ordené:

                —Abra su enfoque.

                —Lo hizo, pero tardó demasiado.


                Lo que vi, fué un primer plano. O él quiso que lo fuera.

         Pero no tenía suficiente práctica en el manejo del aparato y

         me mostró más de lo que deseaba. Pude apreciar que estaba


         en el laboratorio. Y alcancé a ver dónde se hallaba sentado.

                —Todo anda bien aquí —le dije—. ¿Y de ese lado?

                —Muy bien —respondió—. Morbius no ha salido de su


         euforia…  y  Altaira  duerme  aún.  Ninguna  incursión,

         ninguna  alarma.  —Su  tono  era  raro,  más  bien  de

         nerviosidad.

                —¿Y  se  puede  saber  qué  está  haciendo  usted  en  ese


         laboratorio? —le pregunté de improviso.

                Se  sorprendió.  Comenzó  a  tartamudear  algo,  pero  lo

         interrumpí.

                —Está payaseando con ese elevador cerebral. ¡Idiota! —


         le dije.

                Su excitación culminó.

                —¡Escuche, John! —rogó—. ¡Esto es maravillosa! Una





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